Este año el Día Mundial de la Salud se presenta bajo el lema “Del dicho al hecho: el reto de la salud para todos”. Un lema que hace referencia a la Salud Universal, un reto que afronta la Organización Mundial de la Salud y para el que trabaja en el mundo entero con el objetivo de que las personas y comunidades disfruten de los servicios de calidad que necesitan, sin que ello las exponga a dificultades económicas.
Desde CTIC Centro Tecnológico nos damos el lujo de parafrasear el lema de este año y convertirlo en “Del dato al hecho”. En el campo de la tecnología son múltiples los proyectos que prometen analizar datos de salud con objeto de generar nuevo valor y conocimiento en el marco de la medicina traslacional.
Debido al cambio demográfico, y más en concreto al envejecimiento poblacional y la redistribución demográfica, Europa afronta el desafío de encontrar soluciones que permitan desarrollar sistemas nacionales de salud sostenibles y, a la vez, mantener la calidad de vida de las personas.
Existen muchas estrategias a nivel político, sin embargo, el fundamento es básico: permitir que las personas estén sanas el mayor tiempo posible. Y una vez que se manifieste la enfermedad, ofrecerles intervenciones eficaces que no afecten negativamente su calidad de vida, en la medida de lo posible. Las Tecnologías de la Información y la Comunicación aplicadas en salud parecen tener una parte importante de la clave para ofrecer sostenibilidad a estos sistemas y mantener la calidad de vida de las personas a lo largo de toda su vida.
Facilitar la reutilización y el intercambio de datos electrónicos de salud para la investigación es una base importante para la reingeniería y la racionalización de los procesos de investigación y será fundamental para acelerar los ciclos de aprendizaje de la salud y ampliar el conocimiento que se puede utilizar para mejorar la atención médica y los resultados de salud del paciente.
En este sentido, CTIC ha desarrollado distintos proyectos en el que los datos y, más allá, la Inteligencia Artificial, ha facilitado los procesos de diagnóstico y permitido generar alertas tempranas en base a predicciones fundamentadas en la evidencia científica dirigidas a prevenir el avance de las enfermedades o el agravamiento de la enfermedad.
Así TEDS-TB ayudó a crear un sistema experto compuesto por más de 2.000 imágenes para detectar el bacilo de la tuberculosis y clasificar, mediante algoritmos de visión artificial, el grado de gravedad en entornos sin cobertura sanitaria especializada. STRATISTICS, en base al conocimiento de la Clínica Universidad de Navarra y las nociones en sistemas de historia clínica digital e interoperabilidad de TESIS y SIVSA, permitió crear un sistema de apoyo a la decisión clínica para pacientes con comorbilidades asociadas a la diabetes. O, como ejemplo adicional, SISTEM-EP, un dispositivo IoT de bajo coste que permite transportar el conocimiento experto de especialistas de EPOC a cualquier lugar del globo y conectarse con la historia clínica digital del paciente para prediagnosticar su riesgo a padecer dicha enfermedad.
Y seguimos trabajando en ello. Afrontando los desafíos que supone trabajar con datos masivos heterogéneos y procedentes de fuentes diversas. Nuestro conocimiento en TIC se une con los mayores expertos en enfermedades altamente complejas con el convencimiento de que esta colaboración interdisciplinar puede beneficiar sustancialmente tanto al clínico como al paciente.
Además, CTIC, gracias a sus 15 años de experiencia, cuenta con el conocimiento experto para apoyar la generación de estrategias de transformación digital y acompañar su implementación en las organizaciones prestadoras de servicios sanitarios, basándose en la identificación de las tecnologías más adecuadas para resolver sus problemáticas específicas, fomentando el proceso de gestión del cambio, fortaleciendo su cultura de la innovación y demostrando que las tecnologías, por si solas, no dan solución a sus procesos complejos. La resolución de los problemas de investigación y de la labor asistencial exige un análisis pormenorizado y un buen diseño estratégico para la adopción de tecnologías, tanto maduras como emergentes.
Jimena Pascual
-Responsable de la Unidad de Envejecimiento activo y bienestar -
