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Caminamos hacia una sociedad global cada vez más compleja, tecnológicamente avanzada y en un proceso de cambio constante que requiere de una gran capacidad de adaptabilidad.

Si teníamos alguna duda, la complejidad del entorno se ha hecho patente a lo largo de estos meses. Los problemas a los que nos enfrentamos requieren de nuevas ideas, pero sobre todo de nuevos enfoques. En esta intersección la creatividad puede ser nuestra gran aliada.

Es difícil encontrar una actividad humana a la que no pueda aplicarse la creatividad. Nos enfrentamos a la resolución de problemas todos los días, desde tareas sencillas y cotidianas, al desarrollo de proyectos complejos. Los meses que hemos vivido en confinamiento seguro que han supuesto un buen entrenamiento para todos, pero en especial para las familias y los docentes que han tenido que poner a prueba sus habilidades más creativas con los más jóvenes de la casa.

creatividad


En unos casos, utilizamos la creatividad como fórmula para encontrar o diseñar nuevas soluciones y soluciones creativas a los problemas que nos rodean; en otros, como complemento para adaptarnos a este entorno en continuo cambio en el que vivimos, puesto que la creatividad nos ayuda a comprender la realidad, nos ofrece su visión desde distintas perspectivas. La creatividad también se muestra como un valor añadido y/o de diferenciación frente a los demás, cuando la buscamos y la evaluamos como competencia profesional y como claro factor de competitividad e innovación sobre todo en el ámbito empresarial.

La creatividad es una habilidad que nos facilita ver las cosas desde otros puntos de vista, nos ayuda a encontrar nuevas formas de abordar un problema, incluso podríamos hablar que, promueve pensar de una forma diferente.

La digitalización está permitiendo que podamos tener ingentes cantidades de datos sobre cualquier proceso, datos que se pueden convertir en información y conocimiento para encontrar nuevas y mejores soluciones. Y en este punto la creatividad se convierte en una competencia enormemente valiosa.

LinkedIn, la red social profesional más importante y más grande del mundo, elabora desde 2019  un informe anual, evaluando perfiles de candidatos que se presentaron a ofertas de trabajo en ciudades de más de 100.000 personas. Una de las conclusiones que se extraen de este Informe son las soft skills más demandadas por las empresas. Destaca en primer lugar la creatividad junto a otras como la colaboración, la adaptabilidad o la gestión del tiempo. Desde el propio LinkedIn se indica que los reclutadores podrían estar otorgando mayor importancia a estas habilidades porque la tecnología continuará desarrollándose, sin embargo, las habilidades blandas como la creatividad son competencias que no se pueden automatizar.                       
La creatividad es una habilidad en alza, fortalecer nuestras habilidades creativas, las de nuestros hijos e hijas, las de nuestro alumnado, es una de las mejores inversiones que podemos hacer. 
 

Lidia Parra

- Competencias y Talento STEAM -

CTIC Centro Tecnológico

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