Una empresa que trabaja de forma conectada no tiene estructuras rígidas de horarios o funciones, sino que trabaja por objetivos, tiene una alta productividad y se amolda a las necesidades de clientes, trabajadores y colaboradores.
Para hacerlo posible, es necesario asegurarse de que todo el mundo sabe qué tiene que hacer y es capaz de facilitar la disponibilidad de su tiempo y sus conocimientos.
Descubre cómo ser más flexible
¿QUÉ HACE FALTA?
- Generación de confianza: Es importante crear un clima de confianza entre el personal y la entidad que permita una aplicación efectiva de la flexibilidad
- Incorporación redes sociales corporativas: La creación de ambientes participativos favorecen la comunicación bidireccional, el feedback y la expresividad.
- Reinventar el aprendizaje: Cada vez más, las personas valoran los entornos creativos, lejos del control exhaustivo, y más enfocados en el alcance de retos que les sean estimulantes.
- Disposición de una actitud receptiva: Están surgiendo nuevas formas de trabajo, de comunicación y de contratación. Estar abierto a estas nuevas modalidades también es una muestra de flexibilidad.
RECURSOS Y HERRAMIENTAS
Adaptarse o morir
La flexibilidad es la característica que marca la diferencia entre las organizaciones exitosas y las que están abocadas a la desaparición.
El escenario en el que nos encontramos actualmente exige a las organizaciones reaccionar de forma rápida y adecuada a las condiciones en constante cambio.
Aquí tienes una muestra de herramientas que pueden ayudarte a mejorar la flexibilidad de tu empresa:
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